Estatua de Gengis Khan en Ulán Bator, Mongolia
Vía: southcoasttoday.com | Sindya N. Bhanoo | 8 de abril de 2011 (Traducción: G.C.C.)
El Dr. Albert Yu-Min Lin está a la caza de Gengis Khan.
La leyenda dice que Khan, el despiadado conquistador que fue el primer emperador del Imperio Mongol, fue enterrado en una tumba sin marcar en el norte de Mongolia hace aproximadamente 800 años.
Pero encontrar la tumba, dijo Lin, es una tarea que han eludido los científicos durante años. Mongolia abarca más de 600.000 millas cuadradas (1.564.116 km²) en gran parte inexploradas, un territorio rústico, lo que hace que la misión de Lin sea extremadamente difícil.
Por suerte, el científico y explorador de la Universidad de California, en San Diego, tiene más de 7.000 personas en todo el mundo ayudándole con su misión, llamada "Valley of the Khans Project". La idea es encontrar la tumba de Gengis Khan y sus descendientes, así como otros artefactos de la antigua Mongolia.
El ejército de ayudantes de Lin son aficionados, los cuales trabajan desde la comodidad de sus ordenadores personales.
A través de un sitio web llamado "Field Expedition Mongolia", que Lin y sus colegas desarrollaron en conjunto con National Geographic, los voluntarios ayudan a analizar 85.000 imágenes de satélite de alta resolución de Mongolia.
Cada vez que los voluntarios entran en la web se les muestran algunas de estas imágenes. Un tutorial "online" les instruye sobre cómo buscar objetivos particulares y marcarlos como "caminos", "ríos", "estructuras modernas" o "estructuras antiguas", y disponen de un zoom para acercar y alejar, y desplazarse en todas las direcciones.
También se les dijo que simplemente colocaran etiquetas como "otros" si veían algo raro o peculiar. Este es el tipo de juicio impreciso que los humanos pueden realizar, pero no los ordenadores, informa Lin.
"Lo que un ordenador no puede hacer es buscar "cosas raras", pero cuando le preguntas a un cerebro humano, no tiene que decir qué 'raro' es; nosotros ya lo sabemos. Esas cosas extrañas o raras pueden ser importantes hallazgos arqueológicos", afirma Lin.
El verano pasado, Lin y sus colegas estuvieron en Mongolia inspeccionando los lugares que habían sido marcados por los voluntarios conectados "online". Cada vez que había un grupo de etiquetas con la marca "antigua estructura" u "otros", ellos anotaban las coordenadas de latitud y longitud, cogían sus dispositivos de GPS, y salían a inspecionarlos.
"Literalmente, salíamos a caballo o cogíamos un helicóptero e íbamos a chequear los lugares", dijo Lin. "Cada etiqueta se ponderaba teniendo en cuenta el número de personas que había etiquetado la misma cosa".
Proyectos como éste marcan un nuevo giro como "ciencia ciudadana", donde las nuevas tecnologías, cuando se utilizan con eficacia por grandes grupos de personas, pueden ayudar a acelerar los avances científicos, reducir costes y aumentar la eficiencia.
Algunas veces los voluntarios "online" llevan a los exploradores a hallazgos decepcionantes, tales como un rebaño de ovejas, a consecuencia de una foto de satélite en la que parecía que había una estructura antigua. Pero ha habido también algunos resultados notables, como el descubrimiento de unas tumbas de la Edad del Bronce de hace 3.000 años, o restos de grandes ciudades y antiguos monolitos ocultos en la vasta región esteparia.
"Estos hallazgos son difíciles de encontrar a caballo, pero desde el espacio y con las imágenes usted puede localizar estas formas", sostiene Lin.
Aunque los científicos profesionales han colaborado con los aficionados durante décadas, las redes sociales e Internet están haciendo que sea más fructífera que nunca.
"Hemos encontrado que podíamos hacer algo que fuera lo suficientemente atractivo como para inspirar a la gente a participar sin tener que pagar", dice Lin."Esta es la parte de la ciencia ciudadana que es más interesante para mí: ¿cómo podemos motivar a la gente a emplear su tiempo?".
¿Cómo? "Haciendo que sea divertido", respondió Lin.
El Dr. Lin obteniendo imágenes por satélite de Mongolia. Foto: Erik Jepsen, National Geographic
Lin comenzó a pensar en la creación de una expedición "online", vinculada con una expedición real, hace unos cinco años, cuando "Amazon.com's Mechanical Turk" hizo su debut.
En el mercado "online" de aprovisonamiento libre (crowd-sourcing), "Mechanical Turk" admite solicitantes para pequeñas tareas pagándoles por su tiempo. Cualquier persona con una cuenta en "Amazon" puede participar, y las tareas suelen ser bastante simples, tales como "seleccionar las imágenes con tatuajes de este conjunto", o "verificar la existencia de estos sitios web de negocios". Por algunas tareas pagan sólo unos centavos, por tareas de verificación, mientras que por otras pagan más.
Lin comprendió que él podría conseguir una mayor atracción mediante la creación de una web que ofreciera una experiencia divertida, más que una que pagara. "La gente está muy emocionada de aprender acerca de la arqueología de Mongolia", dijo. "Ellos comienzan aprendiendo cosas sobre lo que están haciendo y se sienten más conectados con lo que está pasando en esa parte del mundo".
Cada voluntario que conecta con el "Valley of Khans project" (desarrollado por una empresa de diseño llamada "Digitaria") consigue sentirse como un explorador, "excavar" a través de las imágenes y sentirlo como un juego, pero realizando un trabajo que tiene muchas más ramificaciones importantes.
"Te conecta más a nivel personal que ir a un museo", dijo Allison Shefcyk, de Connecticut y de 24 años de edad, la cual etiquetó ya más de 50.000 imágenes desde el ordenador de su casa. "Terminé reuniendo algunos libros sobre Gengis Khan y la cultura de los mongoles, y, aunque nunca puse un pie allí, todo ello te proporciona una experiencia profundamente conmovedora".
---------------------------------------------------------------------------------------------------
Aquellos a los que les apetezca explorar en busca de la tumba de Gengis Khan, dentro del proyecto del Dr. Lin, pueden igualmente inscribirse a través de National Geographic en este enlace.