Los colaboradores de Figueroa Agosto desde el gobierno ¿Cuándo serán investigados?
Por el solo hecho de entregar un carnet del organismo responsabilidad de cuidar la seguridad del Estado, esta persona cometió un delito criminal
El juicio que se sigue a los vinculados a Figueroa Agosto ha dado como resultado revelaciones importantes sobre los vínculos de personeros vinculados al gobierno, que sabían la naturaleza de los crímenes de Figueroa Agosto y que, sin importar las implicaciones de sus delitos, colaboraron con él para que evadiera ser apresado.
Es cierto que se trata de revelaciones tardías, y que Figueroa Agosto está bajo prisión en Puerto Rico. Pero este juicio y sus resultados deben conducir a las autoridades a tomar medidas que sancionen a los responsables de usar posiciones públicas para proteger a narcotraficantes a cambio de beneficios particulares.
Ya se ha dicho que el ahora senador Félix Bautista facilitó contratos a dos jóvenes sin categoría profesional para realizar obras públicas, y que contribuyó con la creación de una compañía de carpeta que apareciera con “experiencia”, para que pudiera recibir contratos por 16 millones de pesos. Eso debe ser investigado, y para bien del senador y hombre público, aclararse todo cuanto se ha dicho sobre él, porque es una figura que implica al Partido de la Liberación Dominicana y al gobierno. La mujer del César no solamente de ser seria, sino también parecerse, se ha dicho y repetido hasta la saciedad.
La última revelación que ha surgido es que fue un oficial del Ejército Nacional, coronel José Francisco Rodríguez Fernández, la persona que facilitó un carnet del Departamento Nacional de Investigaciones al capo José David Figueroa Agosto, y que lo hizo a sabiendas de conocer los negocios turbios del capo boricua.
Por el solo hecho de entregar un carnet del organismo responsabilidad de cuidar la seguridad del Estado, esta persona cometió un delito criminal, independientemente de a quién lo haya entregado. No se puede vender ni regalar carnet de identidad de instituciones estatales. Pero un segundo crimen, tan grande como el primero, fue que lo entregó a sabiendas de que se utilizaría el carnet para delinquir y para evadir la autoridad de cualquier oficial de la DNCD, la PN o de las Fuerzas Armadas.
Se entiende que esa persona debió ser apresada inmediatamente, puesta bajo prisión, investigada hasta la últimas consecuencias, y sancionada como manda la ley. Y no se hizo nada. Sencillamente se procedió con su cancelación, por parte del Poder Ejecutivo, sin que sus acciones fueran sancionadas. ¿Cómo es posible que se actúe con tanta irresponsabilidad en un caso tan delicado? ¿No le encontraron responsabilidad? ¿Tenía enllavaduras en las alturas que le protegieron? ¿El Ministerio Público prefirió el silencio?
El oficial fue cancelado en febrero de este año. Es decir, que durante el tiempo transcurrido pudo haber seguido vendiendo carnets del DNI y cometiendo otras fechorías, bajo la sombra protectora de alguien muy poderoso ¿Quién será?
Si fue cancelado por decreto del Presidente, cuáles fueron los motivos para que fuera cancelado. Su cédula es 001-1222828-3, y en el 2007 fue designado en la Unidad de Apoyo Administrativo de la Comandancia General del Ejército Nacional, al servicio del Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas.
El dato es demasiado contundente, y en estos casos no puede producirse ningún perdón, bajo ninguna circunstancia, porque no se justifica y no existen circunstancias atenuantes. Fue un delito de traición al país y de colaboración con el tráfico de drogas y el crimen ¿A cambio de qué? Eso debe explicarlo el coronel.