La 'Reina del Technicolor' cumple 100 años en el 2012
REPÚBLICA DOMINICANA PREPARA LA CELEBRACIÓN DEL NACIMIENTO DE MARÍA MONTEZ, LA ACTRIZ DOMINICANA QUE BRILLÓ EN LOS ESCENARIOS DE HOLLYWOOD
Tenía ocho años más de lo que se creía y no era parte de la nobleza española como creó la leyenda, sino la segunda hija de una familia acomodada que siempre soñó con ser actriz de cine en un pequeño pueblo del sur de República Dominicana, de donde finalmente salió a los 20 años para alcanzar el estrellato y poner a Hollywood a sus pies convertida en la “Reina del Technicolor”.
María Montez, la protagonista de “Arabian Nights”, 1942 (“Las mil y una noches”) del director John Rawlins, y de la serie de películas que siguen a este filme hasta “Sudan”, 1945 (“La reina del Nilo”), es recordada en estos meses en que se prepara la celebración del centenario de su nacimiento, ocurrido el 6 de junio de 1912.
“Junto a la indiscutible fama de María existía confusión en cuanto a ciertos aspectos de su vida como su lugar de nacimiento: algunos creían que era española o mexicana y hasta que había estudiado en un convento en Canarias”, dijo a LISTIN DIARIO Margarita Vicens de Morales, la autora de “María Montez, su vida”, la biografía más completa de la actriz jamás escrita hasta el momento.
La obra abarca la etapa de la vida de María África Gracia Vidal, María Montez, transcurrida en su lugar de origen y las que ocurren en Hollywood y en Europa hasta su desaparición física, que tuvo lugar en París en 1951.
“El libro desmiente con pruebas documentales ambas afirmaciones: María Montez nació en Barahona (República Dominicana) y vivió en dicha ciudad hasta que aceptó la proposición de matrimonio de William McFeeters, representante en dicha ciudad del First National City Bank of New York, en 1932, a la edad de 20 años”, afirmó la autora.
Vicens inició la investigación de la vida de Montez en 1976, con el propósito de “llegar a la autenticidad de los hechos”, debido a la contradicción en los datos que hasta entonces se conocían acerca de la dominicana más famosa del Hollywood de los años cuarenta.
Parte de los resultados de ese trabajo fueron publicados en una serie de artículos en el periódico Listín Diario, proceso que culminaría en 1992 con la publicación de la primera edición del libro “María Montez, su vida”.
Además de aspectos inéditos de la vida de la “Reina del Technicolor” (llamada por lo bien que lucía al aparecer en las películas rodadas con la entonces novedosa técnica), la obra reúne un total de 369 fotos de Montez, muchas de ellas obsequiadas a parientes y amigos y otras inéditas como la que aparece en la inauguración de la nueva iglesia de Barahona y la bienvenida al nuevo párroco Fray Joaquín María de Andújar que data de 1926, cuando María contaba apenas con 14 años, dijo Vicens.
La autora explica que como la mayoría de los artistas de su época, Montez se propuso hacer lo más atractiva posible la versión de su vida ante los ojos de los espectadores, y entre otras cosas dijo que era ocho años menor de lo que en realidad era, lo que fue confirmado en la oficialía de Barahona y que tenía ocho años de diferencia con el libro de actas de la institución.
“Es decir que había nacido en 1920 y no en 1912 como realmente ocurrió según su acta de nacimiento, documento que aparece en el libro. Esto explica en parte que no existiera uniformidad entre las diversas fuentes en cuanto a la versión de su vida antes de convertirse en estrella”, dijo Vicens.
La segunda hija del español Isidoro Gracia y de la dominicana Teresa Vidal, nacida el 6 de junio de 1912, manifestó desde pequeña una gran vocación por el cine. Asistía con regularidad a la única sala que existía en su pueblo natal y practicaba el inglés que aprendía en una vitrola, con los hijos de los norteamericanos que administraban un ingenio de azúcar en Barahona, y que le solían prestar la revista de cine “Fans Magazines”.
Luego de algunos años de matrimonio y de residencia en República Dominicana y Puerto Rico, María Montez llega a Nueva York, Estados Unidos, en julio de 1939, decidida a convertirse en actriz, lo que logró en Hollywood a partir del año siguiente.
Con “Arabian Nigths” (1942), la actriz dominicana conquista el estrellato y se consagra como una estrella que disfruta de la admiración de la mayoría de los espectadores. Pero fue en Italia, con el filme “Il Ladro di Venezia” de John Brahm, en 1950, en la que la “Sirena de Hollywood”, como también se le llamaba, confirma su extraordinaria capacidad para la actuación.
Entre el 42 y el 50, Montez filma “The Exile” (1947) (“La caída de un reino”) del célebre Max Ophuls, “el mejor de los directores para los que actuó a través de su carrera”, según Vicens, y en la que compartió roles con el reconocido actor Douglas Fairbanks Jr.
(+)
MONTEZ DESTACA EN EL CINE DE EUROPA A su llegada a Europa, Montez actúa en la película ‘Hans Le Marin’, de 1948, del director FranÁois Villiers hermano de su segundo esposo Jean Pierre Aumont. “Este último es su coestrella en este filme en el que asimismo actúa la conocida estrella de entonces Lilli Palmer”, dice Margarita Vicens.
La investigadora agregó que luego actúa junto a luminarias de la época como Erich Von Stroheim, Arletty, Pierre Brasseur y Marcel Dalio, en la película ‘Portrait d’un Assassin’ (1949), del director Bernand Roland, filme que junto a ‘Il Ladro di Venezia’ resumen las mejores actuaciones de su vida artística.
Montez, dice Vicens, fue en su época una gran estrella que contó y que aún cuenta con una legión de admiradores que quedaban deslumbrados por su impresionante belleza y una serie de características físicas que la favorecían para lucir mejor que ninguna otra en las películas rodadas a color, “con características que no se han encontrado en ninguna otra estrella de ninguna época hasta ahora”.
Pero la actriz también “se esforzó a través de toda su carrera de desempeñar roles que revelaran sus verdaderas cualidades artísticas, lo que motivó su ruptura con la Universal Pictures y sus filmes de carácter ‘escapista’ para probarse en Europa”.
La autora dice que ante la proximidad del primer centenario de su nacimiento, se espera que sus compatriotas reflexionen acerca de la trascendencia de su éxito, reconociendo su gran tenacidad para alcanzar el estrellato, su impresionante belleza y su particular talento, gracias al cual actuaba con gran poder de convicción, pese a su corta vida que duró menos de cuatro décadas.
El gobierno ha designado una comisión para rendir homenaje a la actriz, que preside el ministro de Cultura, José Rafael Lantigua , y que entre otros integran Vicens de Morales.
La programación establece la creación de un museo en Barahona dedicado a su memoria, pero en terrenos que aún no han sido adquiridos, la proyección de un festival de cine con todas sus películas, y la exhibición de los trajes (originales y réplicas) que usó la “Reina del Technicolor”.
Hace poco, el Festival de Cine de Funglode fue dedicado a la estrella dominicana, la UASD realizó un conversatorio sobre su vida y se prepara una película sobre la actriz.
|